Hola a todos de nuevo!
Después de este breve impass que me he marcado, influido en parte -cómo no- por exámenes y agobios, he vuelto de nuevo al mundo real y terrestre. En primer lugar, felicidades a Jesús, que ayer fue su cumpleaños, y dada su fidelidad al blog, me apetece mencionarle.
Y en segundo, sólo anotar un pequeño cambio en mis preferencias culinarias. Aunque más que preferencias, novedades. Como la mayoría sabéis, este fin de semana he vuelto a tierras celtas para ver a mi querido Panchito (a partir de ahora Cacahuete). Y en una de éstas, me tropecé con la casa-museo de la mítica cerveza Guiness. Una cosa llevó a la otra, y no, no penséis que acabé borracha en casa de algún irlandés. Fue algo mucho mejor! Os cuento:
Primero me dieron a probar lo que ellos llamaban "cata de Guiness", que no era más que un culillo de vaso con Guiness. Y teniendo en cuenta que ya sales de aquella sala algo afectado, y el olor, la situación y la ligera extravagancia te hacen incluso perder la noción del tiempo, y del espacio y por supuesto del dinero, te ves sentado en una planta vertiginosa, con las vistas de Dublín a tu alcance y una pinta de Guiness en la mano. No, no todo era idílico, pero sí un tanto romántico. Y si tenemos en cuenta, que justo antes de mi embotamiento cerebral debido a esta bebida negruzca y amarga, me había tomado el mejor muffin de chocolate del mundo, pues la mañana se compensa!
Pero claro, que no vayáis a pensar mal. Es que da la casualidad de que esa visita accidentada, es la responsable de que ahora me guste la cerveza!!Sí, sí, ahora me gusta. Y no por el excelente sabor de la Guiness (no dudo de que a los irlandeses, que ya la maman desde que son bebés, les encante. Es, como quien dice, un sabor adquirido); es que después de eso todo está rico. Así que ayer me sentí algo extraña cuando, ya en Madrid y de vuelta a la rutina, le pedí a mi querida amiga Maleny que me diese una. Claro, que igual no debería mencionar que todos me llamaron de inútil para arriba porque no sabía tirarla, pero da igual. Porque las cosas hay que hacerlas por partes, y yo ya he tardado demasiado en llegar a ésta!
Ahora ya podré decir que me voy de cañas y tapas. Alguien se apunta??
